Hay una serie de actores que se especializan en determinado tipo de papeles.
Otros se convierten en "secundarios de lujo". Philip Seymour Hoffman era sin duda uno de esos secundarios que podían transformar una película.
Su reciente fallecimiento nos deja una lista de interpretaciones solemnes donde destaca especialmente la interpretación magnífica en Capote.
Un actor lleno de talento y con un enorme registro.
De los muchos momentos que podría elegir para esta entrada, he preferido tomar una secuencia de la película Misión Imposible III. En ella se transforma en Owen Davian, uno de esos malos incómodos, de los que no pierden la calma ni el gesto con la presión... de los que ponen nerviso, porque no tienen nada que perder.
Un Minuto de Oro para recordar a un actor... el resto es historia.
Y para el recuerdo, como si se tratara de una premonición el trailer de una de sus ultimas películas, El Último Concierto.
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